Lo que uno siente, se puede expresar de muchas formas y debemos encontrar la mejor manera de hacerlo.Las emociones son reacciones de nuestro organismo frente a situaciones, conocimientos o información que recibimos del medio que nos rodea. Son experiencias efectivas que pueden ser intensas, pasajeras o bruscas. En la adolescencia, hay emociones positivas como el amor y la amistad, pero a veces resultan difíciles de expresar por inseguridad y temor al rechazo o al ridículo, lo que entorpece un demostración afectiva.
También hay emociones negativas que pueden generar reacciones agresivas con las personas que están a tu alrededor y contigo mismo(a), causando daño y haciendo más difícil que puedas lograr algún objetivo.
Para poder expresar adecuadamente nuestras emociones, primero es necesario reconocerlas. Es importante saber que éstas producen respuestas fisiológicas, conductuales y hasta gestuales en nuestro organismo. Para ello, veamos cuáles son las más importantes.
* La ira: rabia o cólera, nos predispone a la defensa o al ataque , se produce cuando sufrimos una frustración, un engaño, una ofensa. Con la ira, el corazón late más fuerte y más rápido, la sangre se va hacia los punos y estos se cierran como preparándose para golpear.
* El miedo: temor , pánico, ansiedad, inquietud, nos predispone a realizar movimientos de huida y aparece cuando sentimos que estamos en peligro. Con el miedo, podemos paralizarnos por un ,momento como para avaluar que se debe hace , huir, ocultarse o atacar, el rostro palidece porque la sangre se va a las piernas, para facilitar la huida.
* La felicidad: alegría, entusiasmo, placer o gozo, hace que se experimente un estado de satisfacción y bienestar, aumenta la energía, nos predispone a la acción e inhibe sentimientos negativos. Ayuda a enfrentar cualquier tarea.
* La sorpresa: Se produce como consecuencia de un acontecimiento inesperado, esta relacionada con la curiosidad. Las cejas se arquean, se levantan, lo que hace que la luz aumente en las retinas y se haga más fácil explorar u observar un acontecimiento inesperado.
* La tristeza: depresión, pena, dolor o melancolía, se asocia con la disminución de energía, poco entusiasmo y vitalidad. Se manifiesta cuando nos enfrentamos a una pérdida. El metabolismo del organismo se hace más lento, generando el espacio para asimilar la pérdida y elaborar un plan para afrontarla.
* La aversión: antipatía, hostilidad o disgusto, nos produce rechazo y alejamiento de una determinada situación u objeto.
las emociones aparecen en nosotros y se manifiestan en nuestro organismo sin que necesariamente se tenga mucha conciencia de ellas, no podemos elegir como reaccionar frente a ellas y sobre todo, cómo reaccionar frente a ellas y sobre todo, cómo dirigir nuestros actos.
Cuando las emociones que se sienten provocan reacciones agresoras, generalmente lo primero que se hace es buscar culpables: " Ella me gritaba, por eso yo..." " yo le pegue porque él me sacó de quicio..." "él empezó primero..."; "yo nací torpe, por eso actúo así...". Uno se comporta como si los otros o las cosas que pasan , nos obliga a actuar de una determinada manera, es decir , como si no tuvieramos autocontrol.
TOLERANCIA A LA FRUSTRACIÓN
Cuando no logramos un objetivo que deseamos alcanzar o surge un imprevisto que nos desestabiliza, se produce una frustración. A lo largo de la vida, estaremos a diversos tipos de situaciones difíciles, grandes y pequeñas. Cuando sentimos que estamos más cerca de lograr lo que deseamos, cuesta más aceptar que no lo conseguimos. Sin embargo, es saludable reconocer que no siempre podemos tener el control de todas las situaciones y por ello no lograremos siempre lo que deseamos.
Frente a esto, el asumir una actitud serena nos permitirá evaluar se debemos insistir, si es posible y realista el persistir, o bien, si debemos cambiar de objetivo o de estrategia. la responsabilidad, autonomía y autoestima mejoran la capacidad de tolerancia a la frustración.
Durante la pubertad y la adolescencia, tus estados de animo son variables debido a los cambios hormonales de tu cuerpo y las situaciones que vives. Es probable que muchas veces no puedas explicar por que estáis así. Aprendemos a reconocer y comprender tus emociones te ayudará a ser responsable de ellas y a lograr el control.
Cuando uno reconoce que es responsable de la forma como reacciona, está tomando una actitud activa frente a si mismo y está tomando conciencia de las reacciones que normalmente se tiene , asumiendo la responsabilidad de las consecuencias.
sin embargo, el ser conscientes de la responsabilidad de nuestras acciones, no es suficiente para dominar nuestros impulsos. Por eso, es importante tener una actitud reflexiva cuando nos equivocamos y aceptar el error tratando de superarlo.
Algunas ideas para crecer emocionalmente
1. El primer paso para aprender a expresar adecuadamente las emociones es tomarse un momento para reflexionar sobre las cosas que pasan y los sentimientos que surgen.
2.Reflexionar sobre los valores que se quieren defender en la vida, como por ejemplo, la verdad, la libertad, el respeto a la vida, etc, tratando de actuar de acuerdo a ellos.
3. Tratar de ser conscientes de las propias emociones y expresarlas con mayor frecuencia.
4. Enfrentar los errores, el error debe ser un reto por superar.
5. Tratar de expresar con palabras lo que sentimos.
6. Identificar nuestras debilidades: que situaciones nos generan sentimientos de cólera, tristeza, alegría, etc.
7. Reconocer lo positivo en todas las situaciones.
8. Evitar ponerse en el papel de victima.
9. Pensar en los otros
10. Buscar ayuda cuando se necesita.
ACTIVIDAD
ANALIZAR
Cómo se comporta; que dice y que hace
Enojado
Avergonzada
Feliz
Ansioso
Asustada
Ilusionada